El hombre de las mil caras
James Skerritt es un hombre polifacético: escritor, director, cineasta independiente, operador de cámara autónomo, editor… Está claro que si quiere escribir todo eso en su tarjeta de visita va a tener que hacerlo en letra muy pequeña.
Para su proyecto de fotografía más reciente, 'Hello! Pleased to meet you.' , el artista ha tomado instantáneas de personas que le han inspirado o influido de alguna manera cada día durante un año.
En los impactantes retratos en blanco y negro de James no hay reglas ni objetivos. Algunos son el resultado de un encuentro casual, mientras que otros se han planeado con antelación y ha habido café y conversación de por medio, pero todos y cada uno de ellos reflejan la conexión que se ha establecido y son algo tangible que James se puede llevar consigo del encuentro.
Establecer una conexión
Se podría decir que las tarjetas de visita cumplen una función parecida. Es una parte importante del intercambio entre dos personas y sirve como recordatorio constante de un encuentro mucho después de que se haya producido.
Con esta conexión en mente, James ha creado un juego de Tarjetas de Visita Cuadradas para promocionar su proyecto, aprovechando Printfinity para imprimir un retrato distinto en cada tarjeta. Pronto se ha dado cuenta de que tanto las propias tarjetas como el objeto de su proyecto han funcionado de maravilla a la hora de romper el hielo. “La gente siempre muestra interés en el proyecto, así que poder enseñarle a mis nuevos clientes mi catálogo de fotos es la mejor forma de darle una dimensión física”, explica James. “Me gusta pensar que es un proyecto distinto, por eso creo que las Tarjetas de Visita Cuadradas son perfectas para mostrarlo. A la gente le fascinan tanto las tarjetas como las imágenes en sí”.
Más allá de un proyecto
‘Hello! Pleased to meet you.' le ha supuesto a James mucho más de lo que se habría imaginado. Llevaba tiempo dándole vueltas a la idea de embarcarse en un proyecto a largo plazo y no podría estar más feliz con la satisfacción de haber conseguido algo que este trabajo le ha reportado. “Ya había empezado proyectos parecidos antes, pero este es el primero que llevo a cabo”, explica. “Observar el progreso del proyecto a diario es una enorme motivación, pero también me ha ayudado a valorar la importancia de tomarse la vida día a día”.
Después de haber comprobado que las Tarjetas de Visita realmente aportan algo a su proyecto actual, James tiene ganas de descubrir otras formas de utilizar su papelería de empresa en futuros proyectos. Tanto si recurre de nuevo a las Tarjeta de Visita Cuadradas como si se decanta por otros productos de la gama de MOO, con tantas facetas profesionales estamos deseando ver lo que se le ocurre.
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