Lo impreso es eterno. Alguna tecnología, no tanto.

La imprenta se inventó en 1440. El fax, más de 500 años después. Pero hoy en día ya nadie envía faxes, sin embargo, la impresión sigue presente. Y desde que esa primera gota de tinta llegó a una página, mucha tecnología ofimática ha ido entrando y saliendo. Algo que pareció innovador y emocionante en un momento, acaba volviéndose obsoleto pocos años después. Como por ejemplo…

Tarjetas electrónicas en lugar de tarjetas de papel

Nos remontamos a principios de la década de los 2000, cuando todo era algo “electrónico”. Cualquier cosa que estuviera vagamente relacionada con Internet parecía nueva y “al día”. Ni siquiera la humilde tarjeta de felicitación estaba a salvo, porque muchas empresas enviaban emails en lugar de Felicitaciones de Navidad físicas. En ese momento fue divertido, pero ahora que todo está online, recibir una tarjeta impresa resulta ser más apreciado.

Todos esos disquetes

Durante algunos años el disquete fue el rey. No cabía mucho en ellos (en los 90, el software venía en varios “disquetes”) pero su uso era inevitable. Estaban en oficinas, casas, en todas partes. Eventualmente acabaron siendo reemplazados por el CD, que duró hasta Internet tomó el relevo. Así que toda esa tecnología actualmente obsoleta, es prácticamente ilegible por la tecnología actual, ha acabado generando una gran cantidad de residuos plásticos. ¿Pero una Postal impresa hace décadas? Sigue siendo un placer verla. (Y no ocupa espacio de memoria en tu PC).

Conectores y cables a montones

Un asunto muy particular que continúa siendo un dolor de cabeza en muchas oficinas. Cuando intentas conectar tu portátil a un monitor y… no encuentras un solo orificio que encaje. Porque a medida que los dispositivos electrónicos se vuelven más ligeros y pequeños, lo mismo sucede con sus conectores. Hay tantos tipos de USB que, si no tienes el dongle adecuado para conectarlos, solo te podemos desear buena suerte. Lo que demuestra por qué la impresión ha resistido el paso del tiempo: es innatamente “compatible con versiones anteriores”, porque es muy simple.

Pantallas holográficas

Con el estreno de Minority Report (¡hace más de dos décadas y cinco años antes del iPhone!), surgió el sueño de las pantallas holográficas y cambiantes. Solo que… nunca pareció consolidarse. Las pantallas táctiles se hicieron realidad, claro, así que tenemos la parte cambiante, pero no la parte holográfica, a menos que se trate de un concierto de rock retro. Todavía hay tiempo para que esto mejore, aunque ya resulta un concepto extrañamente anticuado, como algo de La Guerra de las Galaxias (¡1977!).

Alternativas a las tarjetas de visita digitales

Surgen muchas nuevas ideas entorno a este concepto, pero ninguna parece acabar de consolidarse. Aunque suena algo prometedor, simplemente escanear o pulsar para intercambiar información. Pero primero tienes que conectar a través de Bluetooth, y después descargar la aplicación y cambiar algunos ajustes en tu móvil…. Y para entonces podrías haber entregado unas cuantas tarjetas de visita de verdad. Tal vez algún día haya una versión adecuada, pero ahora mismo la impresión lo hace mejor y más fácil. 

¿Quieres crear algo simple, encantador e inolvidable? Imprímelo. Siempre hay algo nuevo que puedes imaginar. Y nunca tendrás que preocuparte por actualizaciones, adaptadores o dongles.